LUEGO DE AÑOS DE ESPERA, 21 COMUNIDADES RURALES DE ROCAFUERTE TENDRÁN AGUA POTABLE

La gestión eficaz del Gobierno del Nuevo Ecuador permitió acelerar los procesos contractuales que estaban trabados en administraciones anteriores para iniciar los trabajos del proyecto de reconstrucción del sistema de agua potable para 21 comunidades rurales del cantón Rocafuerte, en Manabí.

Hoy el presidente Daniel Noboa anunció que el inicio de esta obra finalmente es una realidad. Para el Gobierno es inadmisible que aún en el país existan comunidades desprovistas del recurso vital del agua. Y en el Nuevo Ecuador esto será cosa del pasado. “Sin agua no hay salud, sin agua no hay ninguna calidad de vida, y de hecho no hay vida”, dijo el Primer Mandatario y añadió que por ello es necesario ejecutar obras con “menos palabras, más acciones”.

Bajo este compromiso, cerca de 20.000 habitantes de las comunidades rurales de El Pueblito, Resbalón, Nueva Paquisha, Sosote, San Pedro, Puerto Loor, Tierras Amarillas, Buenos Aires, San José De Las Peñas, Cerecito, San Jacinto, Higuerón, San Eloy, San Andrés, La Recta, El Cardón, Los Ríos, Las Jaguas, El Cerrito, El Frutillo y La Guayaba serán beneficiados con esta obra que brindará el líquido vital a las familias
de estos sectores.

Este emblemático proyecto implica la reconstrucción de líneas de conducción para garantizar que el agua llegue a los hogares, son aproximadamente 45 kilómetros de tubería, según explicó el ministro Luque. Contará con una inversión de USD 1,5 millones, con apoyo del Banco Europeo de Inversiones y generará 77 plazas de empleo directas, mediante la contratación de mano de obra local. Ocho años después del terremoto aún hay necesidades urgentes por atender en las zonas que fueron afectadas.

El ministro de Transporte y Obras Públicas, Roberto Luque, detalló que para este Gobierno es prioridad rescatar, destrabar y ejecutar obras vitales para la ciudadanía. El acceso a agua segura contribuye también en la lucha contra la desnutrición crónica infantil y a la reducción de casos de disentería, tifoidea, hepatitis y otras enfermedades causadas por el consumo de agua contaminada. “El país va a salir adelante cuando
tengamos agua, combustibles a costos competitivos a nivel mundial, y energía disponible para todos los ecuatorianos. Esos son los tres pilares de productividad para que el Ecuador salga adelante”, concluyó.


 

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